1. m. Grado de utilidad o aptitud de las cosas, para satisfacer las necesidades o proporcionar bienestar o deleite.
2. m. Cualidad de las cosas, en virtud de la cual se da por poseerlas cierta suma de dinero o equivalente.
3. m. Cualidad del ánimo, que mueve a acometer resueltamente grandes empresas y a arrostrar los peligros. U. t. en sent. peyor., denotando osadía, y hasta desvergüenza. ¿Cómo tienes valor para eso? Tuvo valor de negarlo.
5. m. Subsistencia y firmeza de algún acto.
6. m. pl. Títulos representativos o anotaciones en cuenta de participación en sociedades, de cantidades prestadas, de mercaderías, de depósitos y de fondos monetarios, futuros, opciones, etc., que son objeto de operaciones mercantiles. Los valores están en alza, en baja, en calma
Por su parte acción es definida como
1. f. Ejercicio de la posibilidad de hacer.
3. f. Efecto que causa un agente sobre algo. La acción de la erosión sobre las piedras
4. f. En el orador, el cantante y el actor, conjunto de actitudes, movimientos y gestos que acompañan la elocución o el canto.
5. f. En las obras narrativas, dramáticas y cinematográficas, sucesión de acontecimientos y peripecias que constituyen su argumento.
6. f. combate (‖ acción bélica o pelea).
7. f. Der. En sentido procesal, derecho a acudir a un juez o tribunal recabando de él la tutela de un derecho o de un interés.
8. f. Der. Facultad derivada de un derecho subjetivo para hacer valer en juicio el contenido de aquel. Acción reivindicatoria, de nulidad
9. f. Der. Cada una de las partes alícuotas en que se divide el capital de una sociedad anónima
Lo anterior resulta curioso porque partiendo de estas definiciones, resulta que un valor te da valor o que puedes ejercitar una acción por una acción, o bien, que una acción define tu valor o un valor define el alcance de tus acciones y en este ultimo caso, y viceversa. Todo lo anterior, aunque parece un juego de palabras resulta una realidad casi incontrovertible.
Así pues, podemos hacer, basados en dichas definiciones, las siguientes afirmaciones:
A las cosas, personas o acciones se les puede asignar un valor;
Tratándose de cosas pueden ser o no valiosas;
Tratándose de personas pueden se valiosas, valientes o con valores;
Tratándose de acciones pueden definirse como hechos o valores;
Una acción es un valor;
A quien se le atribuyen muchas acciones no es valiente, es valioso;
Por lo tanto llevar a cabo acciones para obtener acciones, sin importar los medios, te convierten en una persona sin valores pero con muchos valores, o lo que es lo mismo, vales pero te valen tus acciones, lo importante son el valor de las acciones, no las acciones con valor.
Cantinflesco? Parece, pero al final del día si vamos tomando las distintas definiciones tiene una perfecta lógica, sobre todo si lo enmarcamos en la cultura mercantilista-materialista en la que vivimos.
Claro que todos siempre queremos mas y mejor de todo, y para todos los nuestros. Un mejor coche, una mejor escuela, un mejor depa, un mejor salario y así una lista interminable de mas y de mejores. Es natural, es normal, el hombre es por naturaleza ambicioso en todos aspectos de su vida. Hay quien quiere mas y mejor en lo material, pero hay quien quien también lo quiere en lo emocional, en lo espiritual y en todos los aspectos de su vida. Querer un mejor coche no hace menos bueno a alguien frente a otro que quiera un mayor acercamiento a Dios, una vida mas santa o llegar al nirvana, simplemente sus objetivos son distintos, sus fines son distintos. Los que nos distingue como personas son los medios, las formas que cada uno elige para la consecución de esos fines y las lineas o guias de conducta que nos rigen para ello, en dos palabras, valores y acciones.
Evidentemente los valores bajo los cuales se justifican las acciones de un individuo pueden ser absolutamente subjetivos, dependen de la óptica de la persona según su formación, su origen, su cultura, su religión y muchos otros factores mas, pero al final esas acciones y esos valores deben de tener un limite y ese limite es determinado por aquel famoso principio: "Mis derechos acaban donde empiezan los de los demás", es decir, mientras yo no le cause un daño a terceros puedo hacer de mi trasero un papalote, sin embargo, es evidente que este principio mucha gente se lo pasa olimpicamente por el papalote. En fin, las personas al final son recordadas por sus acciones por sus acciones. Los hay quienes no tuvieron grandes logros, pero los medios para intentar llegar a ellos fueron de un valor tal, que al final el medio fue el fin. También los hay que habiendo alcanzado grandes logros, son mas recordados por los medios tan viles para conseguirlos y serán recordados como grandes tramposos, grandes estafadores o ambiciosos sin principios, y los hay quienes son recordados tanto por sus grandes logros como por sus medio tan valerosos para conseguirlos, los cuales son los menos, por eso este mundo no ha dado a muchos Gandhis o Madres Teresa.
La pregunta final es: ¿que valor le das a tus acciones? Si pudieran cotizar este tipo de valores en Wall Street ¿estarías a la alza o a la baja? ¿Buscas en tu vida algo tan trascendente como que tus valores guíen tus acciones o algo tan mundano como que tu valor lo defina cuantas acciones tienes? Así nomás a simple vista parece casi lo mismo ¿verdad?